jueves, 28 de junio de 2012

Chal Elise.


    Estrenamos blog y como con algo hay que empezar, vamos a hacerlo con un chal.



    Debo deciros que los chales son uno de los muchos descubrimientos que he hecho en esto del mundo de las lanas. Pensaba que no me gustaban y no les veía mucha utilidad, desde que hice el primero, que os enseñaré más adelante, todos se me antojan y me parecen preciosos, ¡todos! ¡Quiero hacerlos todos! Además, ya he visto que son ideales para poner al cuello, abrigaditos y me agobian menos que las bufandas. Ya os digo, un descubrimiento.





     El caso es que en Labores en red propusieron un Cal y la prenda a realizar era precisamente el chal Elise. Yo ya lo había hecho una vez y me había gustado así que, ni corta ni perezosa, me animé a participar y elegí un algodón rosa y resbaladizo que me ha vuelto loca pero que, una vez bloqueado, ha quedado muy lindo.



     No suelo hacer cosas de color rosa pero esta vez, me hacía falta un chal alegre para un vestido y me pareció que era una buena opción.





     El patrón lo podéis encontrar aquí. Es un chal muy facilito de hacer y con un patrón muy claro, algo que las novatas agradecemos enormemente.



     Y bueno, como hoy es, como quien dice, mi primer día, no puedo irme sin daros la bienvenida y sin agradecer a la madrina de mi blog, Alex, que es una persona estupenda, el maravilloso trabajo que ha hecho al diseñarlo, ¿no os parece que está muy bonito? A mí me gusta mucho.





     Os recomiendo que os asoméis a su blog, está lleno de cosas bonitas y todos los días nos acompaña Rukia, una perrita simpática a la que todo le sienta de maravilla.





     Y como mi mundo de libros y lanas se quedaría incompleto sin los tés, os cuento que esta mañana me acompaña una taza de té negro de navidad. Sí, ya sé que la fecha no es muy acorde pero hoy me apetecía. ¿Sabéis? A pesar de que en Sevilla hace un calor tremendo y yo paso todo el día bebiendo agua y bebidas frías, el primer té de la mañana suele ser negro y lo tomo caliente, no me preguntéis por qué, no sabría deciros pero me da la sensación de que la mañana no empieza si no es con una taza de té caliente.





     Y por hoy poco más, espero que mi nuevo espacio os guste y que en él tengamos muchas cosas que compartir.



     Un abrazo y nos leemos.