Pensaréis que hace media vida que
no paso por aquí y tenéis toda la razón del mundo. Lo cierto es que no esperaba
estar tanto tiempo sin actualizar pero están siendo tiempos un poco revueltos
por aquí, una temporada de incertidumbre, comienzo de proyectos y nervios y
eso, claro, afecta a los blogs. A este, concretamente, al que más porque los
otros dos están relacionados con mi trabajo.
Pero bueno, voy a ver si poco a
poco vuelvo a retomarlo y aunque no sea muy a menudo, escribo y os enseño mis
avances.
Hoy, sin embargo, os
voy a enseñar otra cosa, ¡un paquete que llegó a casa ayer nada menos que desde
París! Y es que la madrina del blog, Alex, no solo me sigue acompañando en mi
camino de tejedora aprendiz con todo el cariño y la paciencia del mundo sino
que, además, me hace regalos tan, tan bonitos como estos. No me digáis que si
abrís un paquete así no os volveríais locos.
Con todo, ninguna de
las fotos hace justicia a estas lanas divinas y suaves, ni a este cuadernito
que está listo para que lo llene de anotaciones, puntos y patrones. Todo, en
directo, es aún mejor.
Y de los marcadores,
¿qué os voy a decir? No pude resistirme a estrenar una de las lanas y a
acompañar la labor con ellos, ¿no son geniales?
Creo que ya os conté
que el mundo de los blogs me ha dado muchas alegrías y me ha acercado a
personas maravillosas, una de esas personas es Alex y creo que detalles como
este lo dicen todo, es una tejedora con las manos mágicas y además es una
amiga, una compañera de batallas en la distancia y sobre todo, una mujer
estupenda.
De verdad, guapa,
muchísimas gracias por esto y por tantas otras cosas.
¿No os morís de ganas
de ver en que se convierten todas estas madejitas? ;)